lunes, 26 de enero de 2015

Motivación

Motivación.

Hace un par de días escuche la historia de una pequeña niña a quién le gustaba la equitación, ella con sus propios medios hizo el esfuerzo por comprar un caballo que tuviera las habilidades necesarias para participar en concursos y eventualmente con su ayuda, tener éxito en este deporte. Sin embargo, en la primer competencia en la que participo no tuvo tanta suerte, de hecho su caballo ni  siquiera pudo brincar el primer obstáculo, después de 3 intentos ella y su caballo quedaron descalificados y aparentemente sus sueños rotos. A pesar de otros tantos desafíos y pruebas que tuvo que sortear esta pequeña, después de muchos sacrificios y largas jornadas de trabajo, logró comprar otro caballo, entrenarlo y realizar uno de sus sueños, participar y ganar varias competencias junto con su caballo.

Esta historia me deja varias preguntas, que empujó a esta pequeña niña a lograr cosas que muchas personas no logramos siquiera concebir? Cuál fue el combustible que alimentó esa ambición por lograr cumplir su sueño en realidad? Como logró reponerse de un rotundo fracaso y triunfar en la consecución de sus más altas aspiraciones y sueños? Que la mantuvo motivada?

He escuchado y leído mucho sobre el tema de la motivación, desde las teorías que hablan sobre mentalizarse en lograr una meta, es decir la visualización, las fechas como el año nuevo, donde mucha gente -más por tradición que por convencimiento-, se motivan y se ponen retos para el año nuevo. Otras teorías hablan de la autosugestión, donde se repiten ya sea mentalmente o en voz alta palabras o frases que alienten a modificar ciertas conductas para lograr un fin determinado. En fin, existen muchas teorías sobre el tema, y muchas personas también se apoyan en ellas para lograr cumplir sus objetivos, sin embargo al paso de los días, la gran mayoría de las personas olvidan varias o la mayoría de sus metas y no logran alcanzar sus objetivos. Entonces, como mantenerse motivado?

Etimológicamente la palabra motivación proviene del latín motivus (movimiento) y el sufijo –ción (acción y efecto). Según esta definición la motivación es la causa de una acción. El famoso conferencista y motivador Zig Ziglar afirma también que la acción lleva a la motivación. Es decir, la repetición constante de determinadas acciones origina e incrementa la motivación en las personas. En mi caso, todos los conceptos o definiciones me ayudaron a entender la motivación como un proceso que inicia con una idea en mente (visualización), una constante repetición de frases e ideas (autosugestión) que puestas en acción ayudan a modificar conductas y a lograr el cumplimiento de objetivos. En mi experiencia en emprendimiento la motivación es fundamental para lograr el éxito. Alex Dey otro gran conferencista, motivador y vendedor dice que una gran idea vale a 10 centavos la docena si no se ponen en acción.

El camino del emprendedor no es fácil, de hecho es todo lo contrario. Crear oportunidades para monetizar las ideas y cumplir así con los objetivos trazados es un proceso con muchos obstáculos. Y para superarlos se requiere constante acción que incremente la motivación. De esta manera a pesar de los aparentes fracasos, la acción y la eventual consecución de metas pequeñas creará un circulo virtuoso, motivación=acción=motivación. Si un proyecto no funciona como lo tenías en mente, es necesario replantear la idea, cambiar de estrategia, y ponerse en movimiento, acción! Dentro de estas acciones es necesario realizar un plan de trabajo que considere la mayoría de las variables de un proyecto de emprendimiento. Por ejemplo, asesores, abogados, diseñadores, empleados, herramientas, etc. Entonces es muy importante enfocar estas acciones hacía dónde nosotros queremos, hacia nuestros objetivos. Esto aumentará la probabilidad de éxito en nuestros proyectos.

Al final de esta reflexión pude contestar algunas de las preguntas sobre la historia de la niña jinete, ella tenía un sueño, una meta, y a pesar de los fracasos y obstáculo, su determinación para llevar a cabo pequeñas acciones que a su vez dieron paso a pequeñas victorias, la llevo a conseguir la motivación necesaria para conquistar grandes batallas y finalmente ver su sueño hecho realidad.


Así que, no te desanimes si al inicio de tu proyecto te encuentras con algún obstáculo, continúa en acción, encuentra tu motivación y sigue adelante.

miércoles, 7 de enero de 2015

Como ya se habrán dado cuenta, si es que están leyendo este blog, soy nuevo en esto de publicar mis ideas en esta plataforma o blog. Hasta esta mi cuarta publicación, he escrito siempre apegándome a dos condiciones, la primera ser honesto y la segunda ser responsable.  
La primer condición se refiere a hablar de mi experiencia y conocimiento principalmente, no acostumbro ni pretendo literalmente copiar ideas y traerlas a mi blog, no me sentiría conforme conmigo mismo. Inevitablemente el conocimiento además de adquirirse por experiencia propia, se adquiere a través de la experiencia de los demás, ya sea a través de algún libro, video o incluso comunicación directa. Entonces es posible que algo de lo que publique en este blog ya lo tengas en algún lugar de tu subconsciente, por esa razón trataré de ayudar a ponerlo de manera más amigable a través de mi experiencia. La segunda condición trata sobre respetar mi tiempo y atender los comentarios de mis seguidores. Me propuse publicar mis temas cada semana, y hasta ahora así lo que hecho. Además es un gusto hacer esto cada 8 días.

Y en relación a mi experiencia sobre emprendimiento, en el anterior blog comenté acerca de compartir los talentos, independiente del estatus laboral actual. Mi película mental, o debería decir, mi visión del futuro es que todas las personas hagamos lo que amamos hacer y obviamente para aquello que tengamos talento y cualidades. De hecho en algunos países está cultura de trabajo ya se realiza. En países como Alemania o Japón desde la primaria los chamacos reciben asesoría para identificar sus fortalezas y hacer consiente al muchacho sobre sus fortalezas para enfocarlo a desarrollar ese talento en beneficio personal pero también en beneficio colectivo.

En Latinoamérica no hemos desarrollado mucho esta cultura, sin embargo cada vez son más los casos en los que gracias al talento combinado de varias personas, se ha logrado finalizar proyectos interesantes, curiosamente de emprendedores (en otra oportunidad les platicaré algunos casos).
Creo que para lograr este propósito (el de compartir talento), es importante perder el miedo en el más amplio de los sentidos. Precisamente hoy escuché a un paisano mexicano que actualmente vive y trabaja en estados unidos, su nombre es Marco Antonio Regil, conductor y emprendedor (esto último lo supe en esta misma charla). Escuchaba a Marco hablar sobre el miedo, el comentaba que el miedo es una especie de freno de mano que nos impide avanzar hacía el logro de nuestros sueños y metas. Considero que tiene mucha razón en su reflexión. Cuántos de nosotros no hemos logrado aquello que soñamos en la vida a causa del miedo?

En emprendimiento es bastante común tener esta sensación, y hablando de compartir talento considero que es necesario hacer a un lado este sentimiento y aventarnos (como decimos en México), arriesgarse para ver materializados nuestras metas y objetivos. Ese miedo al que pensarán o dirán otras personas de nuestras ideas, miedo a perder, miedo a ser rechazado, a fracasar! Pienso que cuándo se trata de emprender, el emprendedor siempre tendrá que tomar riegos medidos, por supuesto; pero considero que casi de manera automática perder el miedo a compartir talento e ideas con otras personas es el inicio de relaciones prosperas.

En mi caso he descubierto que cuándo se pierde este miedo y confías en la otra persona, liberas esa desagradable emoción y tu actitud cambia, incluso este proceso de desprendimiento ayuda a liberar la creatividad y a madurar las ideas. El proceso de explicar tu idea a alguien (sin el miedo al que dirán) facilita el entendimiento propio. Me ha pasado en varias ocasiones que mi idea no era tan solida como yo pensaba, o alguna parte del proceso requería mayor atención o un enfoque distinto para mejorarlo y cuándo compartí mi idea con mi socio u otro emprendedor identifiqué las áreas de oportunidad y regrese a mejorar mi proyecto. Incluso mis socios me han ayudado a fortalecer mis ideas y a lograr resultados certeros, con menor desgaste y más rápido.

Una vez que quitamos este freno de mano, vamos adquiriendo con la practica mucha más experiencia. Esta conducta aprendida nos dará las pautas para evaluar todos los riesgos de manera más ágil y rápida. De esta manera sabremos también en que momento y a quién confiar nuestra información. Obviamente hablando de riesgos medidos es importante tomar todas las consideraciones importante de inicio, por ejemplo temas legales! Aunque perdamos el miedo y tomemos riesgos medidos no vamos a hablar de nuestros proyectos de trabajo con todo mundo. Debo decir que en muchos casos tuve que aprender a identificar estos riesgos cometiendo errores, pero creo firmemente que de no haber tomado esos riesgos, en este momento estaría aún incluso pensando en crear y publicar en mi blog………..


Así que, perdamos el miedo, tomemos riesgos medidos y aventémonos a materializar nuestros sueños!!

martes, 30 de diciembre de 2014

Compartir

En esta ocasión decidí escribir acerca de la acción de compartir. El verbo se define como la acción de distribuir, repartir o dividir algo en varias partes. 

Este blog se creo con la intención de incentivar el intercambio de talentos entre las personas, no importa el estado laboral actual. Puedes ser empleado o no, puedes tener tu propio negocio o la firme intención de iniciarlo. De cualquier manera, si tu intención es empezar algún emprendimiento, mi recomendación es identificar tus talentos en primer lugar. Como podemos compartir algo que no tenemos, o mejor dicho; algo que no sabemos que tenemos……….

Tod@s absolutamente tod@s, tenemos más de alguna cualidad o en el mejor de los casos, un talento poco explotado. Existen cantidades de testimonios de deportistas, por ejemplo, que en la infancia tuvieron algunas decepciones por haber seleccionado algún deporte para el que no tenían todas las aptitudes o talentos y que sin embargo, gracias a su insistencia y trabajo, descubren su verdadero potencial en otra rama del deporte. 

Considero que en los negocios y en la vida esta situación es muy similar, podemos intentar varias veces hasta finalmente encontrar aquello en lo que somos realmente buenos, algo que amamos hacer. Ahora bien, sería mucho más productivo identificar primero “para que” somos buenos y posteriormente elaborar planes de acción hasta lograr el éxito en nuestra empresa o emprendimiento. Sin duda alguna tendremos aciertos y des-aciertos pero el proceso será menos estresante si empezamos por identificar nuestras fortalezas y talentos.

Después es importante identificar nuestros objetivos, siendo muy honestos y realistas con nosotros mismos. De esta manera, ni tu ni nadie podrá detenerte en el camino a lograr tus sueños y metas.  Ahora debemos elaborar nuestro plan con tareas muy específicas, fechas y recursos deben ser incluidos en este proceso.

Y es en este punto donde, en el caso del emprendimiento, es vital haber desarrollado el proceso  completo (talentos, metas y planes de acción) con la intención de ayudarnos entre nosotros mismos a potenciar las ideas o proyectos propios o de algún compañero. Es aquí dónde el verbo compartir empieza a ponerse en acción. En el caso del emprendimiento los talentos pueden compartirse para lograr alianzas que ayuden a concretar ese proyecto que, de manera individual, sería más tardado. Si en tu proyecto de emprendimiento requieres el talento específico de alguien no dudes en buscar ese apoyo, sin duda la ayuda que recibas puede ser la detonante para la otra persona (y para ti mismo!) para echar a volar la imaginación y ser el inicio de muchos proyectos e ideas productivas e innovcadoras.


Así que recuerda identificar tus talentos, define tus metas y tus sueños, construye tus planes de acción y comparte y busca el talento de otros emprendedores como tu…….


miércoles, 24 de diciembre de 2014

Ser Responsable

En el anterior y por cierto primer entrada hago referencia a que en buena medida somos responsables de las cosas que nos suceden. Notarás que esta subrayada la palabra porque es muy importante entender que somos responsables de absolutamente todo lo que acontece en nuestra vida. La familia, los hijos, el trabajo, la casa, los vecinos más un largo etcétera. Si, somos responsables, pero ser responsable es muy distinto de ser culpable. Como seres humanos tenemos una tendencia natural hacía el sentimiento de culpa. Sentirse culpable daña el espíritu de la persona dejándolo casi en un estado de indefensión, creando un sentimiento de frustración y tristeza que merma la capacidad creativa de la persona, afectando incluso el sistema inmunológico. Estos son solo  algunos ejemplos del efecto que causa el sentimiento de culpabilidad en una persona. Los efectos nocivos se manifiestan sicológica y físicamente.

En realidad el término culpable se utiliza en juicios de valor realizados por terceros hacía el comportamiento de una persona. En términos legales por ejemplo, cuándo una persona comete una infracción a la ley, se establece una evaluación de dicho comportamiento a través de un  juicio, mediante el cuál es necesario determinar el grado de “culpabilidad” de la persona en cuestión ante la falta cometida. De esta manera, se determina el grado de retribución (también llamado, pena, castigo, etc.) de la persona hacía con la sociedad, incluyendo a la autoridad misma. En estricta teoría, la persona que pasa por este proceso digamos en un tribunal, es sometido a un aislamiento de la sociedad con la intención de proteger a la misma, en esencia lo que se pretende es que la persona reconozca su falta y mejore su actitud antes de ser re-integrado a la sociedad. Es decir, este periodo de tiempo en aislamiento pretende hacer consiente a la persona por sus actos y que tome responsabilidad de los mismos para mejorar su comportamiento futuro.

Espero haber podido ejemplificar y marcar la diferencia entre culpabilidad y responsabilidad. Responsabilidad es tomar el control, aceptar de manera consiente y personal nuestros actos y en consecuencia fomentar las conductas que mejoren nuestro comportamiento con nosotros mismos y con nuestro entorno. Si, resulta que la primer persona con la que debemos portarnos bien es con nosotros mismos, en segunda instancia debemos procurar tratar de la misma manera a todo y todos quienes nos rodean.
Es necesario entonces, hacernos responsables de nuestros actos y ser consientes de los cambios que se requieren para mejorar en aquellas situaciones que en este momento no están en armonía con nuestros verdaderos deseos. Sin rencores, sin remordimientos, sin culpa pero con la firme intención de no volver a cometer los mismos errores.

A partir de este momento, seremos capaces de entender la razón por la cuál tuvieron lugar algunos eventos en nuestra vida y lo más importante, retomar proyectos y actividades para iniciar el camino de nueva cuenta.


Recuerda en todo momento ser responsable por aquello que vas a pensar, hacer y decir. Y vale la pena que la próxima vez que hagas cualquier tipo de comentario te preguntes si lo que vas a decir es necesario, es amable, es importante?

miércoles, 17 de diciembre de 2014

Bienvenidos

Bienvenidos a Empleamonos, este un blog dirigido a personas que por alguna circunstancia, en este momento de su vida se encuentran en una posición “aparentemente” complicada laboralmente hablando y que además esta situación, deriva e impacta en otras importantísimas áreas de la vida que rodea a todo ser humano como son las relaciones sociales y el esta anímico.

Empleamonos busca ayudar a personas a encontrar su propia valía como seres pensantes con grandes talentos y habilidades. Pretende también servir como una guía y apoyo con respecto a temas sensibles a la autoestima de la persona, ayudando a encontrar escenarios positivos que faciliten la toma de decisiones para incorporarse a la vida productiva, ya sea como empleado en una organización o como emprendedor por cuenta propia.

En situaciones difíciles, todos necesitamos que alguien confíe en nosotros, en nuestras habilidades y capacidades pero sobre todo, necesitamos que alguien nos comprenda. Pasar por un proceso de cambio ya sea voluntario y consciente o uno que sea aparentemente inconsciente y fortuito, es un proceso que requiere apoyo y guía. En mi opinión y experiencia ningún cambio es ajeno a nuestros verdaderos deseos, sueños, aspiraciones y obligaciones que tenemos en nuestra vida.

Desde el punto de vista neurológico y científico, nuestro cerebro trabaja apenas al 5% de su capacidad total, es decir; actuamos cotidianamente apenas con conciencia limitada. Desde el punto de vista holístico, nuestra verdadera misión de vida se manifiesta de manera misteriosa, conspirando con el universo para crear y/o propiciar las situaciones de cambio en nuestra vida cotidiana. No obstante, inconscientes la mayor parte de nuestra vida, no alcanzamos a entender la razón de estos cambios, simplemente estamos distraídos como diría el gran Facundo Cabral.

Pues bien, en mi opinión y experiencia sin este apoyo y guía externo, la persona que atraviesa este proceso de cambio, puede sentirse perdido, desmotivado y en casos graves puede incluso llegar a caer en depresión. Nutrir el espíritu y la autoestima es por lo tanto, el primer escalón para estar más cerca de nuestra misión en la vida. 

Nadie esta solo, tu no estas solo, hay literalmente un universo de personas que en este momento atraviesan la misma situación por la que tu estas pasando, te entendemos y te ayudaremos a salir adelante!

Comparte con nosotros tus comentarios, experiencia y habilidades, tal vez alguien de la comunidad te necesite!


Nos leemos en la siguiente entrada!